El 28 de octubre pasado, un laboratorio de la Universidad Nacional de las Artes, un aula equipada especialmente para el aprendizaje técnico de quienes cursan la carrera de Licenciatura en Diseño de Iluminación de Espectáculos en dicha casa de estudios, fue bautizado con el nombre de Ernesto Diz, renombrado referente en el área.
Eli Sirlin, directora de la carrera de Licenciatura en Diseño de Iluminación de Espectáculos en la Universidad Nacional de las Artes, fue casi una anfitriona el pasado 28 de octubre en la sede sita en la calle Venezuela de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La ocasión, el bautismo de una de las aulas más importantes de la carrera en honor a Ernesto Diz, que estuvo presente también ese día. Luminotecnia participó del encuentro y tuvo la oportunidad de intercambiar algunas palabras con Eli Sirlin. La Universidad Nacional de Artes es una universidad como cualquier otra, solo que sus carreras están todas orientadas a lo artístico: es el resultado de la fusión de todas las escuelas y conservatorios nacionales de arte y reúne música, visuales, dramática, etc., en varias sedes en la ciudad de Buenos Aires. “En el año 2000, cuando se armó la Universidad, se hicieron todas las nuevas carreras”, nos dice Eli y explica que “además de las carreras tradicionales que ya existían como Dirección, Actuación, Escenografía, se crearon otras nuevas, y una de las que se armó fue Diseño de Iluminación de Espectáculos”. Esta carrera, una iniciativa de Mauricio Rinaldi y Carlos Bechara, quienes en su momento armaron el programa, es la primera en su estilo en Latinoamérica, y bien valía la pena a sabiendas de que Buenos Aires es la ciudad con más salas de teatro en el mundo. “En general lo que hay en Latinoamérica son diplomados pero no instancias universitarias, y diplomados más orientados a arquitectura que a iluminación teatral”, declara Eli. En la actualidad, la carrera cuenta con un cuerpo docente conformado por profesionales del medio, junto a escenógrafos y teóricos del arte. Para un óptimo desarrollo de la carrera fue necesario el laboratorio de iluminación en la calle Venezuela. “Puede utilizarse como espacio teatral, más aulas. Nosotros armamos una especie de laboratorio de iluminación, porque es el lugar donde mayoritariamente trabajamos, la mayoría de las materias de la carrera se dan en ese laboratorio”, explicita Eli Sirlin. Y es justamente ese laboratorio el que ahora lleva una placa nueva: lleva el nombre de “Ernesto Diz”, en homenaje a quien dio al diseño de iluminación un empuje sin precedentes en nuestro país, que carga en su trayectoria un renombrado paso por la Universidad de Buenos Aires y más de 25 obras de teatro iluminadas, como Galileo Galilei o Ifigenia en Aúlide. |