SilverLight
Mucho se habla de un cambio de paradigma en el campo de la iluminación, de lo que se conoce como tecnologías tradicionales versus la nueva tecnología led, pero ¿todos sabemos de lo que hablamos?, ¿tenemos claro de qué se trata? Este artículo trata de ayudar a aclarar estos temas.
  
Contexto mundial
Desde la masificación de la bombilla eléctrica con filamento, hace más de cien años, a los avances y evoluciones que se presentaron con las lámparas halógenas, fluorescentes, de descarga, etcétera, los ciclos de vida de los productos se han ido acortando cada vez más y más.
Dos eran las directrices de las nuevas investigaciones y desarrollos:
- La mejora en la eficiencia energética, es decir, obtener mayor cantidad de luz consumiendo menor cantidad de energía eléctrica.
- La miniaturización, es decir, desarrollar fuentes de luz más pequeñas, más puntuales, que permitan mejorar el diseño de las luminarias
Esa lámpara incandescente que durante décadas nos había acompañado en nuestras casas y en nuestras vidas y era un producto muy noble pasó rápidamente a ser uno de los villanos de turno a nivel mundial por su alto consumo de energía e ineficiencia, ya que la gran mayoría de la energía se consumía en calor y no en luz. Hoy, prácticamente, es un producto en extinción en todo el mundo ya que, o se prohibió, o está en vías de ser prohibido y ha sido condenado a su desaparición casi total.
Por el contrario, la tecnología led ha ido evolucionando, desarrollándose cada vez más, rompiendo barreras muy rápidamente y mejorando su desempeño en cada una de sus nuevas versiones. Recordemos que hace tan solo diez años nadie imaginaba una vivienda totalmente iluminada con tecnología led, una realidad que hoy vivimos.
Actualmente, en nuestro país, todos estamos siendo testigos y protagonistas del cambio definitivo de las tecnologías tradicionales por esta tecnología disruptiva conocida como “led”; este cambio se ha acelerado en los últimos meses y se traduce en la explosión en ventas de lámparas, tubos y luminarias leds, acompañando la tendencia mundial de mejorar la eficiencia energética de los productos eléctricos, reduciendo el consumo eléctrico y, finalmente, ahorrando dinero en nuestras cuentas del servicio eléctrico.
La estrategia que se ha adoptado en el mercado mundial de iluminación se ha dividido en dos etapas: la primera, conocida como “Retrofit”, que consiste en el aprovechamiento de las instalaciones existentes y el reemplazo de un producto de tecnología tradicional y reemplazarlo con otro con tecnología led; y la segunda, denominada “Ledfit”, que se basa en el diseño de productos específicos para la tecnología led.
Actualmente, estamos en medio de esa transición, con productos de ambas etapas y, si bien los productos aún conservan los formatos conocidos, seguramente en un futuro no muy lejano comenzaremos a ver diseños revolucionarios y de vanguardia.
Mercado argentino
En ese contexto, hizo su aparición la marca SilverLight que, desde su irrupción en el mercado de la iluminación, se ha ido imponiendo y ganando terreno, prestigio y popularidad como una marca de productos con tecnología led de excelente calidad y a un precio muy competitivo.
SilverLight nació como la marca insignia de la unidad de negocios de iluminación de Dayton y su permanente crecimiento es producto de una estrategia muy elaborada que se basa en los siguientes pilares:
- Desarrollo de proveedores confiables, a través de una preselección, selección y evaluación permanente de ellos;
- ensayos de productos para verificación de la calidad, la seguridad eléctrica y la eficiencia energética en laboratorios de terceras partes;
- conocimiento del mercado para ofrecer los productos adecuados, con especialistas del rubro;
- innovación permanente, con la incorporación de productos con los últimos adelantos tecnológicos;
- difusión de la marca para ayudar a los clientes con la venta, a través de campañas de marketing;
- capacitación a clientes sobre conceptos y productos, con personal técnico propio;
- servicio posventa.
El portafolio de productos
SilverLight es un portafolio completo de productos que incluye, entre otros, bulbos para aplicaciones residenciales, hoteles, para reemplazar a las incandescentes, halógenas ahorradoras de energía o de bajo consumo.
En potencias de seis, nueve coma cinco, doce y quince watts (6, 9,5, 12 y 15 W) que se corresponden con quinientos diez, ochocientos cincuenta y cinco, mil ochenta y mil cuatrocientos cincuenta lúmenes (510, 855, 1.080 y 1.450 lm), tienen mejor disipación del calor debido a sus componentes termoplásticos y a su plaqueta de aluminio de mayor espesor, con conector integrado que reduce las fallas por las soldaduras manuales.
Se presentan también downlights para aplicaciones residenciales, oficinas y comerciales, como reemplazo de los fluorescentes compactos o de descarga. Tanto para empotrar como para embutir, redondos o cuadrados en potencias de seis, doce, dieciocho y veinticuatro watts (6, 12, 18 y 24 W) que corresponden a cuatrocientos, novecientos cuarenta, mil cuatrocientos sesenta y mil ochocientos ochenta lúmenes (400, 940, 1.460 y 1.880 lm). Cuentan con una plaqueta con leds flexible que evita el daño o rotura y posterior falla parcial o total de la luminaria, además, un difusor plástico blanco de alta eficiencia que mejora el flujo luminoso, dando mayor cantidad de luz.
Las galponeras están diseñadas para aplicaciones industriales, comerciales, para reemplazo de lámparas de bajo consumo espiraladas de alta potencia. Presentan diseño compacto y liviano, con cubierta traslúcida para evitar el deslumbramiento. Vienen en potencias de veinte, treinta y cincuenta watts (20, 30 y 50 W) que corresponden a dos mil, tres mil y cinco mil lúmenes (2.000, 3.000 y 5.000 lm).
Los tubos sirven a aplicaciones comerciales, industriales, oficinas, como reemplazo de los tubos fluorescentes lineales. En potencias de nueve, dieciocho y veintidós watts (9, 18 y 22 W), que se corresponden con novecientos, mil ochocientos y dos mil doscientos lúmenes (900, 1.800 y 2.200 lm), son totalmente plásticos, lo que reduce la torsión sin romperse, para aplicaciones con vibraciones. Tienen difusor plástico blanco de alta eficiencia que evita ver los leds y el encandilamiento. No necesitan instalaciones antiexplosivas, ni protecciones adicionales para su funcionamiento. |
